Cual el amo, tal el criado.
Por principio de adecuacion, conforme pregonan, a la par, otros refranes: A tal casa, tal aldaba; A tal señor, tal honor, y A cada paje, su ropaje. Es, en suma, lo que el marques de la Ensenada le contesto a Felipe V cuando este, alarmado por la fastuosidad del aristocrata, le llamo a capitulo en palacio: Señor, por la librea del criado se ha de conocer la grandeza del amo..