George Orwell tiene en 1984 su novela más reconocida y aclamada. Escrita al final de su vida, Orwell pudo ver poco acerca del impacto que tuvo en su época y tiene hoy en día.
La historia está ambientada en un año de ficción que data de 1984, en la que el totalitarismo habría dominado el mundo entero. El planeta está dividido en tres grandes bloques, Eurasia, Asia Oriental y Oceanía, y cada uno de estos bloques sigue, básicamente, la misma doctrina ideológica. El gobierno controla todo y las personas vivían en un constante estado de alienación siendo manipuladas a creer y a seguir voluntariamente los deseos del Partido.
La supresión de la libertad es tan grande que existe la Policía del Pensamiento, que castiga a quienes cometieron crímenes de ideas (las distintas ideologías alternativas al Partido), además de rodajes que el Estado hacía de las personas a través de pantallas de espionaje dentro de sus propios hogares.
Existía algo más desalentador en este universo, el gobierno había creado una única lengua limitada que podría expresar apenas un concepto y el resto eran excluidos. De esta manera aseguraban y limitaban la expresión de ideas. Con todo, el futuro próximo carecía de recursos del lenguaje que permitieran describir verbalmente la situación. Esa era una visión que prácticamente bloqueaba toda esperanza.
El protagonista es Winston Smith incierto y promiscuo. Él vive en Oceanía, Londres y es un funcionario de un gobierno pequeño que trabaja para el Ministerio de la Verdad. En este órgano la información vieja se rehace para crear un sentido de la perfección constante del estado y la más grande de su presunto jefe: el Gran Hermano (Big Brother). Smith, íntimamente, no está de acuerdo con las atrocidades que comete el partido, y tímidamente trata de deshacerse de ese poder. Después de vivir un romance con Julia, una mujer que piensa como él, Winston es detenido y llevado a la tortura (física y mental) en la sala 101, donde el dolor y el miedo llevan a negar los ideales y aceptar los del Gran Hermano.
1984 es un manifiesto contra la autoridad despótica y una alerta a los peligros que pueden surgir de un gobierno totalitario. La obra asusta a los lectores para describir a esta sociedad como casi irreversible, y les hace reflexionar sobre el privilegio del libre albedrío y la importancia de un mantenimiento constante. Lástima que cada día esa libertad se limita de un modo u otro.
