William Faulkner, novelista y cuentista norteamericano, nació en 1897, en New Albany, y murió en 1962, en Byhalia. Fue galardonado con el Premio Nobel de literatura en 1949. Posteriormente ganó el National Book Award en 1951, por Collected Stories y en 1955, por la novela Una fábula. Ganó dos premios Pulitzer, la primera en 1955 por Una fábula y la segunda en 1962 por Los rateros (The Reivers).
Utilizando la técnica del flujo de conciencia, consagrada por James Joyce, Virginia Woolf, Marcel Proust y Thomas Mann, Faulkner narró la decadencia del sur de los Estados Unidos, interiorizándola en sus personajes, la mayoría de ellos viviendo en situaciones desesperadas en el condado imaginario. Por describir a menudo múltiples puntos de vista (en muchas ocasiones simultáneamente) e imponer cambios bruscos del tiempo narrativo, la obra faulkneriana es tenida como hermética y desafiante.
Entre sus trabajos destacan: The Sound and Fury (1929), As I Lay Dying (1930), Light in August (1932) y The Unvanquished (1938). En estas y otras obras buscaba crear una imagen personal, entre lo histórico y lo imaginario, del sur de los Estados Unidos.
Estilísticamente, la literatura de Faulkner se caracteriza por una escritura compleja, con largos párrafos, anidando largos periodos con puntuación irregular, escasa, sino existente, intercalados por paréntesis y guiones con largos periodos de separación. Esta forma de escritura, típica del denominado flujo de conciencia (del inglés: stream of consciousness), inaugurada por Proust, exige al lector profunda complicidad y aguda capacidad de concentración. Por ello se recomienda que el primer contacto con su obra sea hecho a través de sus cuentos o de novelas más accesibles, como Santuario y, de cierta forma, Los rateros.
Faulkner murió de complicaciones cardíacas el 06 de julio de 1962, poco después de lanzar su última novela, Los rateros.