Evolución de la fotografía a partir del siglo XX
A principios del siglo XX la fotografía comercial creció con rapidez y las mejoras del blanco y negro abrieron trayecto a todos aquellos que carecían del tiempo y la habilidad para los tan liosos procedimientos del siglo anterior. En 1907 se pusieron a disposición del público habitualmente los primeros materiales comerciales de película en color, unas placas de cristal llamadas Autochromes Lumière en honor a sus autores, los franceses Auguste y Louis Lumière. En esta fase las fotografías en color se tomaban con cámaras de tres exposiciones.
En la década próxima, el perfeccionamiento de los métodos fotomecánicos empleados en la imprenta provocó una gran demanda de fotógrafos para ilustrar escrituras en periódicos y revistas. Esta demanda creó un nuevo campo comercial para la fotografía, el publicitario. Los progresos tecnológicos, que simplificaban materiales y aparatos fotográficos, coadyuvaron a la proliferación de la fotografía como un entretenimiento o dedicación profesional para un gran número de personas.
Le Corbusier
La otra gran aportación al movimiento moderno partió de Francia. Las iniciales expresiones habían pasado más o menos inadvertidas en Francia, Inglaterra y Estados Unidos, sometidos durante las décadas de 1920 y 1930 por el Art Déco, un estilo empleado en edificios públicos y en la mayoría de los rascacielos americanas, como el Empire State Building (1930) de Nueva York. Una excepción fue Charles Édouard Jeanneret, apodado Le Corbusier, un suizo francófono discípulo de Auguste Perret y Peter Behrens establecido en París, cuyas aportaciones a la arquitectura contemporánea le conceden un lugar privilegiado en el ámbito internacional.
Historia de la fotografía
El término cámara deriva de camera, que en latín significa ‘habitación’ o ‘cámara’. La cámara oscura original era una habitación cuya única fuente de luz era un minúsculo orificio en una de las paredes. La luz que penetraba en ella por aquel orificio proyectaba una imagen del exterior en la pared opuesta. A pesar de que la imagen así formada resultaba invertida y borrosa, los artistas emplearon esta técnica, mucho antes de que se inventase la película, para esbozar escenas proyectadas por la cámara. Con el intervalo de los siglos la cámara lóbrega evolucionó y se transformó en una pequeña caja manejable, y al orificio se le instaló una lente óptica para conquistar una imagen más clara y definida.
Arte textil inca
Los incas emplearon el diseño geométrico para ornamentar sus tejidos, de gran valor simbólico y religioso.
Conocieron un desarrollo espectacular en este tipo de arte. Primeramente se daba a las fibras (lana y algodón) un tinte con colorantes naturales, para a continuación ser hiladas con la ayuda de ruecas y después tejidas en diversos tipos de telares rudimentarios. El más corriente, aún se sigue usando en los Andes, consistía en dos lienzos dispuestos sobre un plano horizontal, uno establecido a un árbol o a un poste y el otro atado a una correa que el tejedor pasaba en torno a los riñones. Las técnicas conocidas eran muy variadas, sin embargo para hacer tejidos dirigidos a fines de culto se utilizaba el brocado, el bordado y la tapicería, siendo las piezas salidas de los talleres de Paracas las más apreciadas. Estas admiradas telas podían alcanzar hasta 20 metros de longitud y se encontraban ornamentadas con una perfecta maestría y buen gusto con motivos zoomorfos policromos, marcando, sin duda, uno de los más brillantes momentos del arte universal del tejido.
La Nueva Ola francesa
Francia continuó dominando el mercado mundial del cine artístico en las décadas de los años 1950 y 1960, produciendo cineastas muy independientes que experimentaron diversos modos de expresión. De este modo, Jacques Tati hizo comedias muy personales, reviviendo la pantomima ligera con Las vacaciones de Monsieur Hulot (1953) o Mi tío (1958), entre otras. Con menos éxito comercial, sin embargo con el aprecio de los críticos (que eran los cineastas de su propio conjunto), se situaron los directores de la llamada nouvelle vague (nueva ola), inspirados entre otros por Robert Bresson, con El diario de un cura de campaña (1951), cintas introspectivas y sobrias, con una fotografía sencilla y producidas con muy bajos cálculos, en las que se muestra un punto de vista agudo y detallado del mundo, a través de planos medios perseverantes, lo que les confiere un aire literario o teatral. Adicionalmente de esta influencia francesa, los jóvenes de la nouvelle vague se basaron en el cine comercial americano de Howard Hawks, Alfred Hitchcock y John Ford, partiendo de su experiencia como espectadores y críticos cinematográficos agrupados en la revista Cahiers du Cinéma, desde la que expusieron su teoría de quién es el verdadero autor: en el cine es únicamente el director, cuya personalidad queda grabada en la cinta pese a las presiones de los estudios o las influencias exteriores de cualquier otro tipo.
La Bauhaus
En Alemania y en Austria indagaciones afines llevaron a la instauración de un estilo moderno. Especialmente prominentes fueron las innovaciones de dos arquitectos austriacos: Otto Wagner, que acentuó la cometido, la textura del material y la claridad estructural, y Adolf Loos, que propugnó el uso de las formas geométricas. Estos y otros esfuerzos por encontrar un lenguaje para la nueva era industrial se fundieron en la personalidad del arquitecto germánico Walter Gropius, nombrado gerente de la escuela de arte de Weimar tras la I Guerra Mundial.
Junto a su colega Adolf Meyer, Gropius, que se había formado en el estudio de Peter Behrens, se había destacado ya por sus proyectos modélicos de fábricas. La escuela de Weimar, con la denominación de Bauhaus, se desplazó con posterioridad a Dessau, donde los nuevos edificios (1925-1926) supusieron la codificación definitiva de los principios del movimiento moderno: ventanas horizontales, muro-cortina de vidrio, disposición racional y diseño global de todos los elementos. Al próximo año se consolidó a escala internacional con las Weissenhof Siedlung (casas obreras) cerca de Stuttgart, dirigidas por Ludwig Mies van der Rohe (otro discípulo de Behrens que en 1930 tomó el mando de la Bauhaus, sucediendo al arquitecto Hans Meyer) y en las que intervinieron varios arquitectos europeos.
Orfebrería, plumería y otras artes aztecas
Aunque los orfebres mixtecos que realizaron las ofrendas de las sepulturas de Monte Albán fueron los mejores de Mesoamérica, los aztecas consiguieron tal maestría en la fundición, combinando oro y plata, que no se quedaron atrás. Los metales se empleaban básicamente para hacer joyas: collares, pendientes, pectorales, orejeras, bezotes (adornos que se ponían en un orificio practicado bajo el labio inferior) y pulseras. Igualmente se hacían figuras y recipientes.
Utilizaban la cera perdida y eran maestros en la fundición, hasta el punto de fabricar figuras articuladas. Frecuentemente se combinaban los metales con piedras semipreciosas como el jade, la amatista y la turquesa, configurando collares y adornos de gran belleza.
Escultura en el siglo XX
De la misma forma que los pintores, los escultores de comienzos del siglo XX estuvieron influidos por el arte primitivo, como se evidencia en las iniciales obras de Constantin Brancusi y Henry Moore. Brancusi simplificó las formas hasta el límite en El recién nacido (1915, Colección Arensberg, Museo de Arte de Filadelfia), que forma parte de una serie de obras inspiradas en formas ovoides, cuyas curvas evocan los ritmos del cuerpo humano sólo rotos por los bordes afilados y el extremo cortado.
Brancusi combinó la sutileza expresiva con una habilidad inigualable para conocer la belleza intrínseca de los materiales, ya fueran madera, piedra o metal. El británico Moore igualmente explotó la textura de los materiales, desarrollando obras curvilíneas de gran delicadeza y monumentalidad. Inspirándose en la escultura prehispánica, acogió como tema se reiterado la figura femenina reclinada (véase Arte y arquitectura precolombinas).
Evolución del cine en color en la historia del cine
Los experimentos con película de color habían empezado ya en 1906, sin embargo sólo se había usado como curiosidad. Los métodos ensayados, como el Technicolor de dos colores, fueron decepcionantes y fracasaban en el intento de entusiasmar al público. Pero hacia 1933 el Technicolor se había perfeccionado, con un método de tres colores comercializable, empleado por vez primera en la cinta La feria de la vanidad (1935), de Rouben Mamoulian, adaptación de la obra literaria en prosa de William Makepeace Thackeray. La popularidad del color creció, y durante la década de 1940 se usó especialmente en una serie de musicales clásicos de la MGM (Metro Goldwyn Mayer), entre los que destaca Easter Parade (Desfile de Pascua, 1948), de Charles Walters.
El cine sonoro
En 1926 la productora Warner Brothers introdujo el primer método sonoro eficaz, conocido como Vitaphone, durable en la grabación de las bandas sonoras musicales y los escrituras hablados en grandes discos que se sincronizaban con la acción de la pantalla. En 1927, la Warner lanzó El cantor de jazz, de Alan Crosland, la primera cinta sonora, protagonizada por el showman de principio ruso Al Jolson, que alcanzó un éxito inmediata e casual entre el público. Su eslogan, sacado del texto de la cinta “aún no has oído nada”, señaló el final de la era muda. Hacia 1931 el método Vitaphone había sido superado por el Movietone, que grababa el sonido directamente en la cinta, en una banda lateral. Este proceso, desarrollado por Lee de Forest, se transformó en el estándar. El cine sonoro se regresó un fenómeno internacional de la noche a la mañana.
Cerámica precolombina
Cerámica precolombina, la realización de cerámica en América surge, como en el resto del mundo, del menester de acumular, llevar, modificar y consumir algunos alimentos líquidos y sólidos.
Las notorios peculiaridades de la tecnología empleada durante dicho periodo son: el uso de cestos, esquinazo y otros frutos como moldes que se cubren con arcilla para hacerse con recipientes y que se desvanecen con la cocción; la ausencia de torno en la fabricación de piezas, lo que otorga gran libertad al artesano; y el empleo de moldes para la obtención de ciertas formas, en especial figuras y conjuntos escultóricos. La forma de cocer es simplemente por desecación al sol o en horno abierto.
Películas de una bobina
En 1896 el ilusionista francés Georges Méliès demostró que el cine no únicamente servía para grabar la realidad, sino que igualmente podía rehacerla o falsearla. Con estas imaginativas premisas, hizo una serie de cintas que exploraban el potencial cuentativo del nuevo medio, dando comienzo al cine de una sola bobina. En un estudio en las afueras de París, Méliès rodó el primer gran film puesto en escena cuya proyección duró cerca de quince minutos: L’Affaire Dreyfus (El caso Dreyfus, 1899) y filmó Cendrillas (Cenicienta, 1900) en 20 escenas. Pero especialmente a Méliès se le recuerda por sus ingeniosas fantasías como Viaje a la luna (1902) y Alucinaciones del barón de Münchhausen, en las que experimentaba las probabilidades de los trucajes con la cámara de cine. Méliès demostró que deteniendo la cámara en mitad de una toma y reponiendo así pues los elementos de la escena antes de continuar podía, por ejemplo, hacer esfumarse objetos. De la misma forma, retrocediendo la cinta unos cuantos centímetros y comenzando la próxima toma encima de lo ya filmado, conseguía superposiciones, exposiciones dobles y disoluciones (fundidos y encadenados, como elemento de transformación entre diferentes escenas). Sus cortometrajes fueron un éxito inmediato de público y pronto se difundieron por todo el mundo. A pesar de que hoy en día parecen poco más que curiosidades, son precursores significativos de las técnicas y los estilos de un arte así pues balbuceante.
Cubismo
El interés por la escultura primitiva igualmente ejerció un papel destacado en la formación del cubismo. Picasso, en la obra Las señoritas de Avignon (1907, Museo de Arte Moderno, Nueva York), muestra su conocimiento de la antigua escultura africana e ibérica. Picasso y Braque instauraron el cubismo entre 1907 y 1914, uno de los estilos más prominentes de la fase contemporánea. En el cubismo se enfatiza la superficie plana y bidimensional del lienzo y se formula una forma analítica de perspectiva, inspirada en la multiplicidad de los puntos de vista, que niega los cálculos de la pintura convencional tales como los escorzos, la valoración de sombras y el claroscuro. En una primera fase, llamada cubismo analítico, los artistas rastrearon el estudio y desestructura de las formas tridimensionales en múltiples elementos geométricos, a partir de la fragmentación en elementos cúbicos y sus proyecciones planas. Para resaltar aún más la naturaleza científica de la representación, se favorece el uso de una variedad de color apagada y monocroma.
Arte griego
Arte griego, agrupación de expresiones artísticas que se realizaron en Grecia y sus colonias entre los siglos XI y I a.C. A pesar de que esta cultura tuvo su principio en la civilización del Egeo, su evolución ulterior la transformó en una de las fases más prominentes de la historia del arte occidental.
El arte griego se singularizó por la representación naturalista de la figura humana, no únicamente en el aspecto formal, sino igualmente en el modo de evidenciar el movimiento y las emociones. El cuerpo humano, tanto en las representaciones de dioses como en las de seres humanos, se transformó así en la razón básica del arte griego, asociado a los mitos, la literatura y la vida ordinaria.
La interacción del jazz con la música popular y la culta
Los esfuerzos pioneros de Armstrong, Ellington, Henderson y otros músicos hicieron que el jazz adquiriera una influencia preponderante en la música americano de las décadas de 1920 y 1930. Músicos tan conocidos como el director de banda Paul Whiteman emplearon algunos de los recursos rítmicos y melódicos más llamativos del jazz, aunque con menor libertad y talento improvisatorio que el que caracterizaba la música de los notorios intérpretes del género. En un intento de fusionar el jazz con la música ligera, la orquesta de Whiteman estrenó piezas sinfónicas de estilo jazzístico de compositores americanas como George Gershwin. Más cerca de la tradición jazzística de la improvisación y del virtuosismo de los solos se encontraba la música de las bandas de Benny Goodman (que usó muchos arreglos de Henderson), Gene Krupa y Harry James.
Desde los días del ragtime, los compositores de jazz han admirado la música clásica. Varios músicos de la era del swing ‘jazzearon a los clásicos’ en grabaciones como “Bach Goes to Town” (Benny Goodman) o “Ebony Rhapsody” (Ellington y otros). Por su parte, los autores de música clásica rindieron tributo al jazz en obras como Contrastes (1938, encargada por Goodman) del húngaro Béla Bartók y Ebony Concerto (1945, dirigido por la orquesta liderada por Woody Herman) del ruso Ígor Stravinski. Otros compositores, como el americano Aaron Copland o el francés Darius Milhaud, tributoaron al jazz en sus obras.
Escuela de Chicago
Escuela de Chicago, movimiento arquitectónico americano, que apareció a finales del siglo XIX en Chicago, cuyos incondicionales proyectaron rascacielos, una de las iniciales tipologías específicas de la arquitectura moderna. En 1885 el arquitecto e ingeniero William Le Baron Jenney erigió el Home Insurance Building (demolido en 1927), un edificio de diez pisos en el que por primera ocasión se usó un esqueleto absolutamente metálico, formado por columnas de hierro colado y vigas de acero, que sustentaba las superficies de albañilería de suelos y paredes, desarrollando así el arquetipo constructivo del rascacielos.
Arte precolombino: periodo preclásico
La mayoría de los emplazamientos mesoamericanos precolombinos se hallan en lo que actualmente es México.
Las culturas preclásicas más importantes de México fueron la olmeca y las culturas occidentales de Colima, Jalisco y Nayarit.
Artes decorativas en las civilizaciones precolombinas
Muchos de los objetos provenientes de excavaciones precolombinas están asociados con lo funerario y tienen un cometido más utilitario o cultor que decorativo. Aún sin contar con las ventajas de técnicas mecánicas básicas, son objetos de una calidad de ejecución y diseño equiparable a cualquier ejemplo artístico destacado de cualquier parte del mundo preindustrial.
Barroco en Francia
Al inicio del siglo XVII en Francia, la escuela manierista de Fontainebleau propugnaba su actividad gracias a los requeridos para el castillo de Fontainebleau, entre los que destacan la ornamentación de la capilla de la Trinidad con pinturas de Martin Fréminet (1619). El manierismo igualmente se conservó en las pinturas de Jacques Callot y Jacques Bellange. Las escenas tenebristas de Georges de la Tour, sin embargo, recomiendan la influencia de Caravaggio. El naturalismo barroco evolucionó de la mano de artistas como Valentin de Boulogne, que había vivido en Italia, y de aquellos otros que habían tenido relación con los pintores flamencos naturalistas, como los hermanos Le Nain y Philippe de Champaigne.
La pintura del arte románico
La pintura al fresco evolucionó durante el periodo carolingio. Entre los ejemplos preservados más antiguos de pintura mural prerrománica germánica destacan los de la iglesia abacial de San Jorge en Oberzel, en Reichneau; los de la capilla de San Silvestre en Goldbach, en la orilla germánica del lago Constanza; los de San Andrés, cerca de la antigua ciudad de Fulda, al noreste de Frankfurt. Pero, el estilo de las pinturas murales que no se han preservado puede deducirse por los manuscritos miniados de la fase.