El New Deal (Nuevo Trato, en castellano) fue un conjunto de medidas económicas y sociales adoptadas por el gobierno de Franklin D. Roosevelt entre 1933 y 1937, con el objetivo de recuperar la economía de los Estados Unidos de la crisis surgida en 1929. Tenía como principio básico la fuerte intervención del estado en la economía.
Principales características del New Deal (medidas y objetivos)
Inversión del estado fuerte en obras públicas
El gobierno invirtió principalmente en la construcción de obras de infraestructura (puentes, caminos, aeropuertos, centrales hidroeléctricas, represas, hidroeléctricas, puertos, entre otros). Las inversiones fueron destinadas también para la construcción de hospitales, escuelas y otras instalaciones públicas.
El objetivo principal de estas medidas fue la generación de empleos, porque Estados Unidos sufrió mucho con altos niveles de desempleo después de la gran depresión de 1929.
Reforma del sistema bancario y monetario
El gobierno norteamericano, a través de la modificación y creación de leyes, tendría poderes de control y supervisión del mercado financiero. El objetivo era prevenir fraudes financieros, especulación y reducir el riesgo de operación de los bancos y otros agentes financieros.
Precios y control de la producción de las empresas
Como una de las causas de la crisis de 1929 fue el aumento del inventario de las empresas, el New Deal buscaba resolver el problema a través de la fiscalización sobre las existencias para que no aumentasen lo suficiente como para generar un riesgo operacional, llevándolas a la quiebra. Además, los precios de los bienes fueron controlados por el gobierno a fin de evitar el aumento de la inflación.
Incentivos agrícolas
Subvenciones, préstamos y otras medidas fueron destinadas a aumentar la actividad agrícola de la agricultura familiar y los grandes patrimonios. Además de aumentar la producción de la agricultura, estas medidas eran dirigidas al crecimiento en el número de puestos de trabajo en el ambiente rural. Estos incentivos al sector agrícola también pretendían detener el creciente éxodo rural (migración a las ciudades), que estaba generando problemas sociales en grandes centros urbanos.
Creación de medidas dirigidas al sector social
Como una manera de reducir el impacto social de la crisis de 1929, los Estados Unidos crearon el sistema de Seguridad Social, seguro de desempleo y seguro para los ancianos mayores de 65 años.
Reducción de la jornada de trabajo
El objetivo principal de reducir las horas de trabajo semanal fue aumentar el número de empleados, porque las industrias necesitaban mayor mano de obra a contratar.
Resultados
El New Deal fue exitoso, mostrando resultados positivos ya en los principios de 1940. En el mercado de valores, el sistema funcionaría plenamente, el desempleo disminuiría, los trabajadores veían incrementados sus ingresos y las industrias reanudaron su producción, aumentando sus exportaciones y comercio interno.
Aunque los gastos públicos elevados y las renuncias fiscales hayan aumentado la deuda pública, muchos economistas consideran que los resultados positivos, que generaron la salida de la crisis económica, compensaron las pérdidas.