La jerarquía de necesidades de Maslow fue presentada por Abraham Maslow y se refiere a una pirámide con una división jerárquica de las necesidades humanas. En la base de la pirámide están las necesidades de nivel inferior, siendo que, apenas cuando queden satisfechas se escala en una dirección jerárquica más alta para alcanzar la autorrealización, que es el nivel más alto.
Teoría de la Motivación Humana
Abraham Maslow fue un psicólogo del comportamiento miembro de la Human Relations School a fines de la década de los 50. Abraham Maslow nació en Brooklyn, se graduó en Wisconsin y recibió su doctorado en la Universidad de Columbia, donde también trabajó en el departamento de investigación. En el Zoológico del Bronx, estudió el comportamiento de los primates, y entre 1945 y 1947, fue director general de la Maslow Cooperage Corporation. En 1951, fue profesor de psicología social en la Universidad Brandeis. Maslow es principalmente conocido por el desarrollo de la Teoría de la Motivación Humana.
Abraham Maslow sugiere que gran parte de la conducta humana puede ser explicada por sus necesidades y sus deseos. Cuando una necesidad, en particular, se activa, se puede considerar un estímulo a la acción y una fuerza impulsora de las actividades del individuo. Esta necesidad determina lo que se convierte en importante para el individuo y da forma a su comportamiento como tal. En la teoría de Maslow, por lo tanto, las necesidades son una fuente de motivación.
La conducta motivada puede ser vista como una acción que el individuo se obliga a tomar para aliviar la tensión (agradable o desagradable) generada por la presencia de la necesidad o deseo. La acción es intencionadamente centrada para un objeto u objetivo que aliviará la tensión interior.
La teoría de Maslow sobre el comportamiento motivado, por analogía, podría ser utilizado para entender un poco mejor el consumo en la sociedad. Podríamos decir que el acto de comprar un producto o servicio está motivado por una tensión interna dentro del consumidor, generada por una necesidad. Después de comprar el producto o servicio, esta tensión se alivia.
Es importante recordar que aunque la necesidad es el gran motor de la decisión racional de compra, el deseo, la naturaleza profundamente emocional, juega un importante papel en el proceso de compra. Es fácil ver que podemos dejar de comprar algo que necesitamos si no lo deseamos en ese momento. También compramos aquello que no necesitamos cuando así lo deseamos.
La jerarquía de necesidades de Maslow
El comportamiento humano se explica a través de cinco niveles de necesidades. Estas necesidades son dispuestas en orden jerárquico, desde las más primarias e inmaduras (teniendo en vista el tipo de comportamiento que estimulan) hasta las más civilizadas y maduras.
En la base de la pirámide, se encuentra el grupo de necesidades que Maslow considera ser el más básico y reflexivo de los intereses fisiológicos y de supervivencia. Este es el nivel de las necesidades fisiológicas y comprende conductas como la sed o el hambre.
El segundo nivel de la jerarquía incluye una serie de requisitos de seguridad. Una vez que las necesidades fisiológicas quedan satisfechas, la tendencia natural de los seres humanos será la preservación.
Posteriormente, cuando la seguridad se logra, es necesaria la formación de grupos, la asociación de otras personas, es decir, igualarse a los demás. Estas necesidades se conocen como sociales o de asociación.
El siguiente paso en la escala de las necesidades es el de la estima. En este punto, las necesidades de destaque, prominencia, reconocimiento y admiración por el grupo se manifiestan por acciones que buscan la distinción.
A pesar de que las necesidades de estima son difíciles de superar, dada su dependencia de la voluntad de terceros, Maslow sugiere que en algunos casos pueden ser adecuadamente satisfechas, por lo tanto liberan a los individuos para alcanzar el nivel más alto de la jerarquía, la autorrealización. Cuando esto ocurre, la necesidad de maximizar su potencial y poner a prueba su propia capacidad hará que las acciones del individuo se encaminen en busca de la plena satisfacción. Este es el nivel de las necesidades maduras y constructivas de la jerarquía de Maslow, conocidas como necesidades de autorrealización.
Análisis jerárquico de la pirámide de Maslow
Necesidades fisiológicas
Las necesidades fisiológicas son bastante obvias y por lo general se refieren a los requisitos para la supervivencia del individuo o de su especie. Algunos ejemplos de esta categoría son:
- Alimentos (alimentos y agua).
- Respiración.
- Reproducción.
- Reproducción.
- Descanso.
- Homeostasis (equilibrio).
Necesidades de seguridad
Las necesidades de seguridad se refieren a la estabilidad o el mantenimiento de lo que tiene. Entre las necesidades de seguridad se pueden ilustrar:
- Seguridad física.
- Seguridad financiera.
- Seguridad familiar.
- Salud y bienestar.
- Seguridad
- Red de protección contra imprevistos.
Necesidades de asociación
Una vez que las necesidades fisiológicas y de seguridad se cumplen, la tercera capa de la pirámide de necesidades de Maslow habla de la asociación, que se refieren a las necesidades del individuo en la sociedad.
Los requisitos para ser miembro incluyen cuestiones relativas a las relaciones basadas en la emoción, como sentirse aceptado dentro de un grupo o formar parte de algo. Ejemplos de estos requisitos son:
- Amistad.
- Intimidad (amigos, mentores, confidentes).
- Convivencia social (la coexistencia de diversos círculos).
- Familia.
- Organizaciones (clubes, asociaciones, pandillas).
La ausencia de estos elementos hace que las personas sean susceptibles a la soledad, la ansiedad y la depresión.
Necesidades de estima
Después de superar las necesidades fisiológicas, de seguridad y de asociación, el ser humano trata de buscar la estima, ganarse el respeto de los demás o el auto-respeto. Debe tenerse en cuenta que este caso no es sólo la búsqueda de una aceptación de un grupo, sino el reconocimiento personal y la valoración de su contribución dentro de él.
Cuando no se puede satisfacer esta necesidad, aparece la baja autoestima y el complejo de inferioridad.
Necesidad de autorrealización
Este es el último nivel de la pirámide de Maslow. Este requisito se refiere a la motivación para llevar a cabo todo el potencial del ser, es decir, el individuo busca convertirse en lo que puede ser, explorando sus posibilidades. Esto puede ser considerado como el mayor logro motivacional para la naturaleza humana.
Críticas a la Teoría de Maslow
Aunque este marco teórico sea ampliamente utilizado, se observó que las necesidades humanas descritas por Maslow se pueden considerar motivaciones humanas, es decir, son las diversas necesidades que hacen que el hombre tenga motivación para actuar. Sin embargo, es altamente cuestionable el hecho de que exista una jerarquía de tales necesidades.
Es evidente la necesidad de alimentación para la supervivencia o la vivienda como forma de seguridad personal o familiar. Sin embargo, se cuestiona la capacidad para escalar en los niveles siendo que si no se cumplen algunas de sus necesidades parezca incapacitado para acceder a otros niveles superiores. Así, las necesidades básicas pueden pervertir totalmente el sentido jerárquico de la pirámide.
Tomemos por el ejemplo la necesidad de asociación. De acuerdo con la jerarquía de necesidades propuesta por la pirámide, este paso sólo se logra después de satisfacer las necesidades básicas y las necesidades de seguridad. Sin embargo, los seres humanos viven en comunidad y tratan de asociarse al mismo tiempo que buscan satisfacer sus necesidades fisiológicas y de seguridad. La familia, muchas veces, es una fuente de motivación mayor para determinados individuos que la satisfacción de una necesidad física, siendo que la asociación es necesaria para garantizar la seguridad de las personas.
Otro factor generador de motivaciones es el que Viktor Frankl llama «voluntad de sentido». Viktor Frankl era un médico y psiquiatra austriaco, fundador de la Logoterapia, doctrina que explora el significado existencial de la persona y la dimensión espiritual de la existencia.
Según Frankl, el ser humano vive motivado, principalmente, por el deseo de dar sentido a la vida; por esta razón el hombre tiende a participar en la realización de los valores en forma de creaciones, experiencias y actitudes.
La investigación de Viktor Frankl tuvo su evidencia empírica, cuando él, un judío, fue encarcelado en campos de concentración nazis. Señaló que el factor decisivo para la supervivencia en el campo de concentración no era ser fuerte, joven o inteligente: muchas veces un enfermo sobrevivía, mientras que un joven moría; varias veces los hombres más robustos eran los primeros en desesperarse, mientras que los débiles soportaron las pruebas de resistencia.
Frankl llegó a la conclusión que el factor decisivo en la supervivencia de los prisioneros era la cuestión del sentido de la vida. Los que vieron en la vida algún sentido por el que deberían seguir existiendo, tenían una capacidad mucho mayor para la resistencia. Este factor fue lo que Frankl llama «voluntad de sentido».
Así, mientras que la teoría de Maslow nos ayudará a entender que las necesidades son motivadoras, Frankl nos hace conscientes del hecho de que no siempre las necesidades más básicas son las que se eligen para satisfacer primero. Lo que nos mueve es nuestras «voluntad de sentido», es decir, aquello que hace que toda nuestra vida tenga algún sentido.