El zooplancton es el término que designa el grupo de organismos acuáticos heterótrofos, que habitan la columna superficial del agua, sea de ríos, lagos o en el océano. Tienen poca capacidad de movimiento.
Los principales representantes son algunos protozoos, pequeños crustáceos (copépodos y cladóceros), moluscos, oligoquetos, gusanos, larvas de diferentes animales y peces.
Ese conjunto representa el segundo eslabón de la cadena alimentaria de los ecosistemas acuáticos cuya alimentación se basa en el fitoplancton, es decir, consumidores primarios sirviendo de alimento a organismos mayores.
El zooplancton puede clasificarse en dos grupos:
Holoplancton: organismos que pasan todo el ciclo de la vida en el plancton, como los copépodos (más diversificada clase de crustáceos y mayor grupo que constituye el zooplancton).
Meroplancton: organismos que pasan una sola fase de su vida en el plancton, como los huevos, las larvas y animales en fase juvenil, como las larvas de crustáceos, moluscos y equinodermos. Las larvas y los huevos de los peces son parte de meroplancton y son denominadas ictioplancton.
La mayor parte de los organismos que componen el zooplancton se alimentan de microalgas. Por otro lado, son alimento de muchas especies de peces y otros animales, como por ejemplo, la ballena.
El zooplancton es esencial para la preservación del ecosistema acuático, pues está en la base de la cadena alimentaria. Es útil, además, como indicador biológico, en la medida en que es sensible a la contaminación del agua.