El aumento en los niveles de metales pesados proviene de actividades como la minería, industrias de galvanoplastia y de los desechos y efluentes domésticos. Esa actividad ha contribuido a la expansión de metales pesados en los ecosistemas acuáticos naturales, estos metales no pueden ser destruidos y son altamente reactivos.
Pero, ¿por qué es tan perjudicial la presencia de estos metales? Los efectos tóxicos de metales fueron siempre considerados peligrosos, agudos y evidentes, como la anuria (disminución de la secreción urinaria) y presencia de sangre en diarrea, resultantes de la ingestión de mercurio, por ejemplo.
Conoce a continuación los procedimientos que llevan a la contaminación por metales pesados:
- Las industrias utilizan, en sus procesos, metales pesados como el mercurio y varios otros. Esos metales son descartados en los cursos del agua después de ser usados en la línea de producción. Por ejemplo, industrias de pintura, de cloro, de plásticos PVC y la metalurgia.
- Los incineradores de basura urbana producen un humo rico en metales como mercurio, cadmio y plomo, que se volatiliza lanzando metal pesado a largas distancias.
- La modernidad trajo un aumento en los riesgos. A diario, los aparatos electrodomésticos y electrónicos y sus componentes – incluyendo pilas y baterías – se hacen más presentes en nuestra vida cotidiana y junto con estos productos magnetizados se encuentran los metales pesados: mercurio, plomo, cadmio, manganeso y níquel son parte de la composición de muchos aparatos modernos.
- La eliminación incorrecta de los teléfonos celulares y computadoras puede comprometer el medio ambiente, ya que el mercurio está presente en la pantalla de los teléfonos móviles y el plomo se utiliza en la soldadura de las computadoras.
