La “temperatura” de los colores permite distinguir entre los colores fríos y los colores calientes. De este modo, estos fundamentos tienen una base psicológica sobre la percepción del color.
Los colores fríos se asocian a las sensaciones frío y son esencialmente todos los colores derivados del violeta, el azul y el verde. Se consideran colores tranquilos.
Los colores fríos están asociados a elementos materiales como el agua, el frío, el hielo, el mar, el agua, el cielo, los árboles, entre otros.