El cartílago, también llamado de tejido cartilaginoso, corresponde a un tejido conectivo duro, flexible y elástico que no tiene vasos sanguíneos (avascular), vasos linfáticos o nervios.
El tejido cartilaginoso presenta un color blanquecino o gris y se encuentra en varias partes del cuerpo humano, desde la nariz hasta la tráquea, la laringe, la oreja, el codo, las rodillas, los tobillos, entre otros.
A pesar de que el cartílago es un tejido avascular, la nutrición de las células del cartílago se realiza por medio de los vasos sanguíneos del tejido adyacente. Por esta razón también tiene una lenta cicatrización y regeneración.
Funciones del cartílago
El cartílago cubre las articulaciones óseas, con el fin de proporcionar soporte y protección para ciertas partes del cuerpo, tales como la amortiguación del impacto, evitando de ese modo la fricción entre los huesos que asisten el movimiento. Por lo tanto, la presencia de tejido cartilaginoso en las articulaciones que sustentan peso – una vez que ese tejido admite una gran cantidad de carga, como la cadera, la rodilla y el tobillo – es fundamental.
Composición del cartílago
El tejido conjuntivo cartilaginoso se compone de agua, fibras proteicas (fibras elásticas y colágeno), siendo que el 60% está formado por colágeno. Se compone de dos tipos de células, a saber:
Condrocitos: células adultas redondeadas compuestas por una matriz extracelular, las cuales proporcionan resistencia al tejido cartilaginoso, siendo responsables por la producción de colágeno. De acuerdo con su etimología, la palabra condrocito es formada por los términos ‘condros’ (cartílago) y ‘citos’ (células).
Condroblastos: células comúnmente encontradas en los cartílagos de forma que representan los condrocitos jóvenes. Según la etimología de la palabra, ‘chondros’, representa cartílago y ‘blastos’ significa célula joven.
El pericondrio está unido el tejido conectivo que rodea el cartílago, y, según la etimología, la palabra deriva de ‘peri’ que significa alrededor de, y ‘condros’ que corresponde al cartílago. Así, además de revestimiento del tejido, el periocondrio posee una función muy importante visto que auxilia en la obtención y absorción de los nutrientes traídos por la sangre recibido por la matriz y distribuida entre las células cartilaginosas.
Tipos de cartílago
A partir de la textura y cantidad de fibras presentes, los cartílagos son clasificados en:
Cartílago fibroso: llamado fibrocartílago, cuenta con una gran cantidad de colágeno y no tiene pericondrio, siendo encontrado en la mandíbula, la columna vertebral, los meniscos (rodilla) y la articulación de pubis.
Cartílago elástico: cartílago ligero y flexible que cuenta con una gran cantidad de fibras elásticas (elastina) y baja cantidad de colágeno, que se encuentra en los oídos, la epiglotis y la laringe.
Cartílago hialino: formado por densas fibras de colágeno, siendo el cartílago de revestimiento óseo más abundante del cuerpo humano, muy resistente, encontrado en las tráqueas, bronquios y fosas nasales.
Enfermedades relacionadas con el cartílago
Muchas enfermedades están asociadas con el desgaste del cartílago, tales como artrosis, osteoartrosis u osteoartritis que es la enfermedad reumática más común causada por una lesión del cartílago articular, cambiando su espesor.
Tengamos en cuenta que dado que el cartílago no tiene nervios, no causa dolor, un factor que pone en peligro el avance de diversas enfermedades relacionadas con el tejido de cartílago: enfermedad de Bessel-Hagem (desarrollo anormal del cartílago), artritis reumatoide (inflamación de las articulaciones), entre otros.
Curiosidad
El esqueleto de algunos vertebrados consiste en tejido cartilaginoso, por ejemplo, peces cartilaginosos, como los tiburones y rayas.