Algunas pruebas para el reconocimiento de una transformación química son: precipitado efervescencia, cambio de color, aparición de luz y transferencia de calor.
Las dos principales transformaciones por las cuales la materia pasa son la física (la constitución del material no cambia, apenas sufre un cambio de formato y tamaño) y química (la composición del material es alterada).
Pero, ¿cómo podemos identificar si hubo realmente una transformación química es decir, una reacción química, o si simplemente ocurrió un fenómeno físico? Para constatar dicha transformación (o su ausencia) existen algunas características de los materiales que pueden ser observadas antes y después de la transformación, además de algunas manifestaciones visuales, cambios físicos, que ocurren durante la reacción.
Las principales se enumeran a continuación, pero recuerda que las reacciones químicas ocurren a nivel microscópico, habiendo un reordenamiento de los átomos en que los enlaces que forman las sustancias iniciales (reactivos) son rotos y son realizados nuevos enlaces químicos para la formación de nuevas sustancias (productos). Por tanto, las maneras de identificar las reacciones mencionadas abajo no son aplicables en el 100% de los casos. Muchas ocurren sin ninguna alteración visual. Así, para una determinación segura, si hubo o no reacción, es necesaria la determinación de las propiedades específicas de los reactivos y de los productos, como puntos de fusión y ebullición, densidad y solubilidad.
Efervescencia: se observa la formación de burbujas cuando la reacción implica la formación de cualquier sustancia gaseosa. La siguiente figura muestra una pastilla antiácido estomacal cuando es colocada en agua. Sabemos que hay una gran efervescencia. El gas no estaba presente en el agua ni en el comprimido aisladamente, pero se formó por la reacción entre ellos.
El comprimido efervescente en agua, un ejemplo de reacción química
Precipitado: a menudo, cuando dos sustancias líquidas o en solución acuosa reaccionan, ocurre la formación de un precipitado, que puede ser un sólido o una turbidez de una solución líquida que queda bien visible. Por ejemplo, cuando mezclamos nitrato de plomo y yoduro de potasio, se forma un precipitado amarillo que es una nueva sustancia, el yoduro de plomo.
Formación del precipitado de yoduro de plomo
Cambio de color: este cambio físico es generalmente el resultado de reacciones en las que hay transferencia de electrones (óxido-reducción o, simplemente, reacción redox), ocurriendo la formación de cationes que proporcionan el color característico. Por ejemplo, una solución acuosa de sulfato de cobre II es azul porque posee los cationes cobre (Cu2+). Otro ejemplo es la combustión de los fuegos artificiales, que usa sales de diferentes cationes para originar el efecto colorido que es apreciado.
Transformaciones químicas con cambio de color se pueden ver en muchos casos cotidianos, tales como en frutas podridas, agua sanitaria en tejido de color, quema de papel, cocción de alimentos, cuando las hojas de los árboles se van marchitando y en clavos oxidados.
Hubo cambio de color en estos clavos oxidados debido a la ocurrencia de una reacción redox
Absorción o liberación de energía: esta manifestación puede ser de diversas formas, tales como:
Calor: las reacciones que se producen con la absorción de calor – que se llaman reacciones endotérmicas – que el sistema quede frío. Ya las que ocurren con liberación de calor – las reacciones exotérmicas –, como las reacciones de combustión, dejan el sistema con la temperatura más alta.
La combustión de cerillas es una reacción de combustión que libera calor
Electricidad: Esto sucede, por ejemplo, en las baterías, que son dispositivos que transforman energía química en energía eléctrica a través de reacciones espontáneas de redox (donde ocurre transferencia de electrones).
En la pila ocurren reacciones químicas
Luz: La aparición de la llama o luminosidad es una evidencia de que hubo reacción. Eso en la combustión de alcohol, de carbón, de cerilla, entre otros.